All in the Mazenodian Family
Outside of Jennifer Conklin’s office is a row of photographs of Missionary Oblates. The priests in the photos were former Directors of the
National Shrine of Our Lady of the Snows and the Missionary Association.
The first photograph is of Fr. Edwin Guild, O.M.I. the legendary Oblate who founded the Shrine and Missionary Association and oversaw those ministries for nearly 40 years. Father Guild had many titles and received many honors. But to Jennifer, he was simply “Uncle Edwin.”
Jennifer is Fr. Guild’s great niece. When she recently became the Office Manager for the Oblates’ support office in Belleville, Illinois she extended a family tradition with the Oblates and Shrine that has stretched for generations.
“Father Guild was always so kind and loving and such a compassionately caring man,” said Jennifer. “He loved his biological and Oblate families so dearly.”
Father Guild grew up on a farm in southern Illinois. He attended the Oblates’ St. Henry’s minor seminary in Belleville and was ordained a Missionary Oblate priest on June 11, 1938 at St. Peter’s Cathedral in Belleville at the age of 33.
While working at St. Henry’s, Fr. Guild helped start the Missionary Association of Mary Immaculate to foster devotion to the Blessed Mother under the title of Our Lady of the Snows. Through Fr. Guild’s leadership, devotion to Our Lady of the Snows grew tremendously, so much so that the Oblates decided to build the National Shrine of Our Lady of the Snows in Belleville.
Beginning in 1958, Fr. Guild oversaw the planning, building and expansion of the Shrine. The Shine’s popularity grew extensively and began attracting more than one million visitors a year under Fr. Guild’s leadership.
As the Shrine grew, Jennifer was growing up in southern Illinois; and through Fr. Guild was part of the Oblate family from the very beginning. Father Guild married Jennifer’s parents and was usually in attendance at all the big family events.
When Jennifer’s grandparents, Clarence and Edith Guild moved from Tamms, Illinois to Belleville, they began working for the Oblates. Edith worked at the Missionary Association office helping to process donations to the Oblates and Clarence worked as a groundskeeper at the Shrine.
“As a child I spent a lot of time with my Guild grandparents and we would often go to Mass at the Shrine,” said Jennifer. “Mass at the Outdoor Amphitheatre was always special because of how it beautifully blends faith and nature.”
Jennifer’s mom, Jan, worked at the Oblates’ Missionary Association while attending Althoff High School through a work/study program. Jan and her siblings volunteered at the Annual Shrine Novena.
During the summer Jan would often stay with Fr. Guild’s sister, Margaret, and they would fill rosary boxes and do other gift production work for the Shrine in her garage.
In 2021 Jennifer officially became part of the Oblate family when she was named the Office Manger for the Oblates’ United States Province Support Office based in Belleville. She provides managerial and administrative services to Oblates not only in Belleville but in several states stretching as far away as Alaska.
Jennifer updates personnel files for the Oblates, maintains the Oblate vehicle fleet, coordinates special events and prepares routine and advanced correspondences. She also serves as the liaison between the Oblate ministries in her states with the Oblates’ Provincial headquarters in Washington, D.C.
“It really felt like I came back home when I began working for the Oblates,” said Jennifer. “They have been such an important part of my life and I’m sure they will continue to be for many more years to come.”
Todos en la Familia Mazenodiana
Afuera de la oficina de Jennifer Conklin se puede ver una fila de fotografías de los Misioneros Oblatos. Los sacerdotes que aparecen en ellas son antiguos Directores del Santuario de Nuestra Señora de las Nieves y de la Asociación Misionera.
La primera fotografía pertenece al P. Edwin Guild, O.M.I. el legendario Oblato fundador del Santuario y de la Asociación Misionera, que supervisó esos ministerios por casi 40 años. El Padre Guild tuvo muchos títulos y recibió muchos premios, pero para Jennifer, era sencillamente el “Tío Edwin”.
Jennifer es la sobrina bisnieta del P. Guild y cuando hace poco se convirtió en Gerente de la Oficina de apoyo a los Oblatos en Belleville, Illinois, hizo extensiva una tradición familiar a los Oblatos y el Santuario que ha abarcado generaciones.
“El Padre Guild siempre fue muy amable, cariñoso y compasivo”, dijo Jennifer. “Amaba profundamente a sus familias Oblata y biológica”.
El Padre Guild creció en una granja al sur de Illinois y estuvo en San Enrique, el seminario menor de los Oblatos en Belleville. Fue ordenado sacerdote Misionero Oblato el 11 de junio de 1938 en la Catedral de San Pedro, en Belleville, a los 33 años de edad.
Cuando trabajaba en San Enrique, el P. Guild ayudó a iniciar la Asociación Misionera de María Inmaculada para promover la devoción a la Santísima Virgen bajo el título de Nuestra Señora de las Nieves. A través del liderazgo del P. Guild, la devoción a ella creció tanto, que los Oblatos decidieron construir el Santuario Nacional de Nuestra Señora de las Nieves en Belleville.
A partir de 1958 el P. Guild supervisó la planeación, construcción y expansión del Santuario, cuya popularidad creció grandemente también bajo su dirección y comenzó a atraer a más de un millón de visitantes cada año.
Al mismo tiempo que el Santuario, Jennifer crecía al sur de Illinois y a través del P. Guild fue parte de la familia Oblata desde el principio, pues él celebró el matrimonio de los padres de Jennifer y casi siempre asistía a todos los grandes eventos familiares.
Cuando los abuelos de Jennifer, Clarence y Edith Guild se mudaron de Tamms, Illinois a Belleville, comenzaron a trabajar para los Oblatos. Edith en la oficina de la Asociación Misionera ayudando a procesar los donativos para los Oblatos, y Clarence en el mantenimiento del Santuario.
“Cuando niña pasé mucho tiempo con mis abuelos Guild y a menudo íbamos a Misa en el Santuario”, comentó Jennifer. “La Misa en el Anfiteatro al aire libre siempre era especial por cómo se entrelaza bellamente la fe con la naturaleza”.
Jan, la madre de Jennifer trabajaba en la Asociación Misionera de los Oblatos mientras estudiaba en la Preparatoria Althoff a través de un programa de trabajo/estudio. Jan y sus hermanos eran voluntarios en la Novena Anual del Santuario y en el verano Jan se quedaba con la hermana del P. Guild, Margaret, para llenar en su garage cajas de rosario y produciendo otros artículos para el Santuario.
En 2021 Jennifer se convirtió oficialmente en parte de la familia Oblata al ser nombrada Gerente de la Oficina de Apoyo a los Oblatos de la Provincia de los Estados Unidos, con base en Belleville. Su trabajo no solo abarca servicios administrativos y gerenciales a los Oblatos en Belleville, sino también en varios estados, incluso tan distantes como Alaska.
Jennifer actualiza los expedientes de personal para los Oblatos, se encarga del mantenimiento de los vehículos, coordina eventos especiales y redacta correspondencia de rutina y especial. Además es el enlace entre los ministerios Oblatos en los estados y la oficina Provincial de los Oblatos en Washington, D.C.
“Realmente me sentí de vuelta en casa cuando comencé a trabajar para los Oblatos”, dijo Jennifer. “Han sido una parte importante de mi vida y estoy segura de que seguirán siéndolo por muchos años más”.
June 2022
Junio de 2022
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