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Oblatos estadounidenses continúan llevando esperanza a los pobres de Brasil
Cuando el p. Cleber Lopes, OMI hizo sus votos perpetuos como Misionero Oblato, tenía que tomar una decisión muy importante. Tuvo el honor de elegir su Cruz Oblata entre cruces que habían pertenecido a Oblatos anteriores. Llevará su cruz durante toda su vida oblata.
El Padre Cleber eligió la Cruz Oblata que había pertenecido al P. Daniel Meehan, OMI El padre Daniel, un oblato estadounidense de Filadelfia, había ministrado en el p. Parroquia de la infancia de Cleber en Sao Paulo, Brasil.
“Tuvo un impacto maravilloso no solo en mí sino en muchas personas en Brasil”, dijo el p. Cléber.
El Padre Daniel ministró en Brasil por más de 40 años. Llegó allí en la década de 1960 junto con docenas de otros oblatos estadounidenses que se sintieron llamados a ministrar a los más pobres del país. Actualmente todavía hay 11 oblatos americanos ministrando en Brasil.
Dos ministerios creados por los Oblatos americanos han tenido un profundo impacto en la vida de los niños de la calle.
Durante más de 50 años, los Oblatos han ayudado a rescatar a niños de la calle de las deplorables condiciones de vida en las calles de Sao Paulo. Una red de refugios, centros comunitarios y programas de distribución de comidas ha atendido a decenas de miles de niños de la calle a lo largo de los años. Un programa de acogida ha rescatado a más de 1000 niños de las calles y los ha colocado en hogares llenos de amor.
El Padre Ed Figueroa, OMI creó la Comunidad de Dios y Nuestra Señora, un hogar para ex niños de la calle en Recife, Brasil. Incluso se convirtió en el padre adoptivo de 50 niños. El Padre Ed también abrió la Escuela Ángel de la Guarda para niños discapacitados junto con dos hermanas religiosas brasileñas.
“Esta es su casa, no un orfanato”, así dice el P. Ed explicó su ministerio. “Cuando ves a estos niños en las calles muriendo de hambre, simplemente no puedes decir que no. Tienes que salvarles la vida”.
Los Oblatos de Estados Unidos Continúan Llevando Esperanza a los Pobres en Brasil
Cuando el P. Cleber Lopes, OMI tomó sus votos perpetuos como Misionero Oblato, fue necesario que tomara una decisión importante: el honor de elegir su Cruz Oblata que llevará por toda su vida como Oblato, de entre varios que pertenecieron a Oblatos anteriores.
El Padre Cleber cambió la Cruz Oblata que perteneció al P. Daniel Meehan, OMI, quien nació en Filadelfia y trabajó en la parroquia de la infancia del P. Cleber en Sao Paulo, Brasil.
“Tuvo un efecto maravilloso, no solo en mí, sino en muchas personas en Brasil”, comentó el P. Cleber.
El ministerio del Padre Daniel en Brasil abarcó más de 40 años desde que llegó ahí en los 1960, junto con docenas de otros Oblatos de Estados Unidos que fueron llamados a trabajar con los más necesitados de los pobres. En la actualidad aun hay 11 de ellos trabajando en Brasil.
Dos de los ministerios instaurados por los Oblatos de los Estados Unidos han tenido efectos importantes en las vidas de los niños de la calle.
Por más de 50 años los Oblatos han ayudado a rescatar niños de la calle de las deplorables condiciones de vida en las calles de Sao Paulo. Una red de albergues, centros comunitarios y programas de distribución de alimentos ha ayudado a cientos de miles de niños de las calles a través de los años. Un programa de adopción ha rescatado a más de 1,000 niños de las calles y los ha colocado en hogares donde recibir amor.
El Padre Ed Figueroa, OMI creó la Comunidad de Dios y Nuestra Señora, un hogar para antiguos niños de la calle en Recife, Brasil. Incluso se convirtió en padre adoptivo de 50 niños. El Padre Ed, junto a dos religiosas brasileñas abrió además la Escuela Ángel Guardián para niños discapacitados.
“Es su hogar y no un orfanato”, explicó el P. Ed al referirse a su ministerio. “Cuando encuentras a estos niños en la calle padeciendo hambre, no puedes negarte. Debes salvar sus vidas”.
junio 2022
junio de 2022
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