Oblate CoverFebruary 2019
Febrero de 2019
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Inside
From the Provincial Fr. Louis Studer, O. M. I.
Making a Difference for 75 Years in Haiti
Oblate Crossings
Celebrating 25 Years of the Missionary Oblates Woods Nature Preserve
The Favelas Are My Kind of Place
The Art of Faith
America’s Senior Oblate Fr. Clarence Zachman Celebrates his 70th Anniversary of Priesthood
“I come from the end of the earth.”
Oblates Respond to Tijuana Migrant Crisis
Saling Away to A Missionary LIfe
Brother Andy Lawlor, O.M.I. Finding His Calling As An Oblate Brother
Donor Highlight Dee and Jack Moynihan
 
 

Navy OblateSailing Away to a Missionary Life

For six years Bro. Daniel Bourg, O.M.I. was a member of the U.S. Navy.  He spent much of that time aboard the USS Enterprise, working as a steam/propulsion mechanical operator.  It was his job to help make the ship go.

Today, Bro. Daniel is an Oblate seminarian whose path to the priesthood is propelling rapidly.  He is ready to go into a missionary life of service to the poor and needy.

“When you work deep in the belly of the ship, you don’t get the attention like the people up on deck,” said Bro. Daniel.  “But without the people down below, nothing gets done.  I see the Oblates as those people, they don’t get the glory, they just make things go.”

Brother Daniel has been going towards life as a Missionary Oblate since childhood, with a few detours along the way.  He was an only child in a family that moved around a lot until settling in rural Minnesota.  At the age of 17, he moved to San Antonio, Texas and began attending St. Anthony High School, which had formerly been an Oblate junior seminary.

“At that time I had a feeling God might be calling me to the priesthood, but it wasn’t the right time yet,” said Bro. Daniel.

Navy OblateSo Bro. Daniel enlisted in the Navy and served for six years, including a deployment to the Persian Gulf.  Brother Daniel said working on the ship showed him the importance of community life and working together as a team, two characteristics that are also important of a missionary priest.

After his time in the Navy, Bro. Daniel thought he would study theology as a layman.  He returned to San Antonio and inquired about classes at Oblate School of Theology.  He felt a connection to the Oblates.  Not only had he attended high school at their former seminary, his dad was working as a nurse at the Oblate Madonna House, caring for elder and infirmed Oblates.  During a meeting with the local Vocation Director, Fr. Charlie Banks, O.M.I. Bro. Daniel accepted an invitation to take part in a Come and See vocation retreat.

“At the Come and See I decided that this was something I could do, live and pray at the Oblate pre-novitiate while going to college to study philosophy,” said Bro. Daniel.

After graduating from D’Youville College with a B.A. in Philosophy, Bro. Daniel spent a year discerning his calling further at the Oblate novitiate in Godfrey, Illinois.  He then returned to San Antonio to continue his studies for the priesthood at Oblate School of Theology.

Currently, Bro. Daniel is finishing up his studies and is looking forward to starting his internship later this year at a yet to be determined location.

Another step in the missionary journey to the priesthood for Bro. Daniel.

Navy OblateZarpando Hacia una Vida Misionera

El Hno. Daniel Bourg, O.M.I. estuvo en la Marina de los E.U. por seis años y mucho de ese tiempo fue a bordo del USS Enterprise, como operador mecánico de vapor/propulsión, tarea que ayudaba a la marcha del barco.
Actualmente el Hno. Daniel es seminarista Oblato, cuyo avance al sacerdocio se propulsa rápidamente. Está listo para ingresar a la vida misionera de servicio a los pobres y necesitados.
“Cuando trabajas en el interior de un barco, la gente de cubierta no te presta atención,” dijo el Hno. Daniel.  “Pero sin la gente allá abajo, no sucede nada. Veo a los Oblatos como esas personas: no reciben la gloria, pero hacen que las cosas sucedan.”
Desde su niñez, el Hermano Daniel ha avanzado hacia la vida como Misionero Oblato con solo algunas desviaciones en el camino. Fue hijo único en su familia, que se mudaba a menudo, hasta establecerse en las afueras de Minnesota.  A los 17 años fue a vivir a  San Antonio, Texas y estudió en la Preparatoria St. Anthony, que anteriormente había sido el seminario menor de los Oblatos.
“En esa época sentía que Dios podría estarme llamando al sacerdocio, pero no era aun el tiempo indicado,” dijo el Hno. Daniel.
Navy OblateAsí que se enlistó en la Marina, donde trabajó por seis años, yendo incluso al Golfo Pérsico. El Hermano Daniel dijo que su trabajo en el buque le mostró la importancia de la vida comunitaria y el trabajo en equipo, dos características de importancia también para un sacerdote misionero.
Después de su período en la Marina, el Hno. Daniel pensó estudiar teología como laico. Volvió a San Antonio e investigó sobre las clases en Oblate School of Theology, sintiendo una conexión con los Oblatos.  No solo había estudiado la preparatoria en su antiguo seminario, sino que su papá trabajaba como enfermero en la Casa Oblata Madonna, cuidando a los Oblatos retirados. En una reunión con el Director Vocacional local, el P. Charlie Banks, O.M.I. el Hno. Daniel aceptó la invitación para participar en el retiro Ven y Verás.
“En Ven y Verás decidí que era algo que podía hacer: vivir y rezar en el prenoviciado de los Oblatos, mientras estudiaba filosofía”, dijo el Hno. Daniel.
Tras graduarse de la Universidad D’Youville con licenciatura en Filosofía, el Hno. Daniel pasó un año discerniendo aun su llamado, en el noviciado Oblato en Godfrey, Illinois y volvió a San Antonio para continuar sus estudios para el sacerdocio, en Oblate School of Theology.
Actualmente, el Hno. Daniel está por terminar sus estudios y espera poder iniciar su año de prácticas más adelante este año, en un lugar por definirse.
Un paso más en el camino misionero del Hno. Daniel hacia el sacerdocio.