A Life Transformed By Christ
For 140 years, young men from around the world have been invited to travel to Rome, Italy to study for the priesthood as Missionary Oblates. In May, Bro. Mateusz Garstecki, O.M.I. followed in their footsteps as he left his hometown of San Antonio, Texas to become a student at the Oblates’ International Roman Scholasticate.
Being selected to study in Rome is an opportunity given to only a handful of Oblate seminarians. The scholasticate is usually home to about 30 students representing roughly 15 countries from around the world.
Brother Mateusz’s journey to Rome began as a child growing up outside of Chicago in a family very proud of their Polish culture. The Garstecki’s traveled to
Poland every couple of years and Bro. Mateusz connected strongly with his Polish and Catholic heritage. The family moved to San Antonio, Texas around the time when Bro. Mateusz finished the fifth grade.
Brother Mateusz started thinking about becoming a priest in his junior year of high school. There were a few events that led him to enter formation with
the Oblates.
“In my own prayer I was asking God to help me know what path to take in my life after completing high school, although religious life or priesthood were not originally part of what I imagined,” said Bro. Mateusz. “Around that time, I also met Sr. Yolanda Flores, S.S.C.J. at our parish and she asked my brothers and I if any one of us might consider a vocation to be a priest. She helped me to get in contact with Fr. Charlie Banks, O.M.I. who was the Vocation Director at the time.”
“The first time I met with Fr. Charlie he mentioned the Oblates were missionaries. I felt that God was speaking to me through this because I have an aunt who is a sister in the Society of Divine Word and works with the poor in Paraguay,” said Bro. Mateusz. “When my siblings and I were growing up, our mother would sometimes tell us about that aunt and her experiences and the challenges of serving in Paraguay. So, when Fr. Charlie mentioned to me that the Oblates were missionaries, it really struck a chord deep inside of me that God might be calling me to dedicate my life in service to the poor as a religious and priest. Later on, I attended an Oblate Come and See program. I was happy to follow this path I believed God was setting me on, and I applied to enter formation.”
After high school Bro. Mateusz joined the Oblate Pre-Novitiate program in Buffalo, New York. At the age of 18 he was the youngest member of the Oblate
community.
As a pre-novice Bro. Mateusz had an opportunity to help for a month with some of the ministries of the Oblates in Tijuana, B.C., Mexico. The experience further opened Bro. Mateusz’s eyes to the various needs of the poor and the big impact Oblates can have through their ministry in those desperate circumstances.
“My time in Tijuana was very blessed, as I met many loving, faithful people in the parish and youth group and I was blessed to witness the work of the Oblates in that part of the world,” said Bro. Mateusz. “Many of the youth there wore shirts that said, “Tranformados por Cristo” which means “Transformed by Christ” and I think those words truly capture how God is touching the lives of the poor through the ministries of the Oblates.”
In 2019-2020 Bro. Mateusz spent a year at the Oblate Novitiate in Godfrey, Illinois a time away from family and friends to examine more deeply if he was being called to religious life and specifically as a Missionary Oblate. The year gave him many opportunities to grow on a human and spiritual level in the context of the community. In August 2020 Bro. Mateusz professed his first vows as an Oblate and enrolled at Oblate School of Theology (OST) in San Antonio, half an hour away from his family home.
As a student at OST, Bro. Mateusz was part of the Blessed Mario Borzaga Formation Community, a group of Oblate seminarians from around the world who are studying at the school. His community included Oblates from not only the United States but also Zambia, Lesotho, Botswana, Nigeria, India, Bangladesh, Kenya and Mexico. Also, two of the Brothers from the U.S. Province are originally from Burma and Haiti.
Brother Mateusz’s year as part of the international community in San Antonio has prepared him well for his studies in Rome. His Oblate journey has already taken him around the world and every step of the way he becomes even more convinced that he must continue to learn how to be a vessel of the Good News. He continues to seek to grow in relationship with God as he encounters many new people and experiences. He prays that all these experiences will help prepare him to minister well as an Oblate among the people of God.
Una Vida Transformada Por Cristo
Por 140 años se han invitado a jóvenes de todo el mundo para ir a Roma, Italia y estudiar para el sacerdocio como Misioneros Oblatos. En mayo, el Hno. Mateusz Garstecki, O.M.I. siguió sus pasos al dejar su ciudad, San Antonio, Texas y estudiar en el Escolasticado Romano Internacional de los Oblatos.
Ser seleccionado para estudiar en Roma es una oportunidad que solo algunos seminaristas Oblatos reciben. El escolasticado normalmente alberga a cerca de 30 estudiantes, representando a más o menos 15 países de todo el mundo.
El viaje del Hermano Mateusz a Roma comenzó cuando era niño y vivía en las afueras de Chicago, en una familia muy orgullosa de su cultura polaca. La familia Garstecki viajaba a Polonia cada dos años y el Hno. Mateusz estableció una fuerte conexión con su herencia católica polaca. La familia se mudó a San Antonio, Texas cuando el Hno. Mateusz terminaba el quinto grado.
La idea de convertirse en sacerdote llegó al Hermano Mateusz en su primer año de preparatoria y algunos sucesos le llevaron a entrar a la formación con los Oblatos.
“En mis oraciones le pedía ayuda a Dios para saber qué rumbo tomar en mi vida después de terminar la preparatoria, aunque la vida religiosa o el sacerdocio no eran parte de lo que imaginaba”, dijo el Hno. Mateusz. “En ese tiempo también conocí a la Hna. Yolanda Flores, S.S.C.J. en nuestra parroquia, quien le preguntó a mis hermanos si alguno consideraría la vocación como sacerdote. Ella me ayudó a contactar al P. Charlie Banks, O.M.I., Director Vocacional”.
“La primera vez que conocí al P. Charlie me comentó que los Oblatos eran misioneros y sentí que Dios me hablaba a través de ello, porque tengo una tía que es Hermana de la Sociedad del Divino Verbo y trabaja con los pobres en Paraguay”, dijo el Hno. Mateusz. “Al crecer mis hermanos y yo, en ocasiones mi mamá nos contaba sobre la tía y sus experiencias y retos al trabajar en Paraguay. Así que cuando el P. Charlie me dijo que los Oblatos eran misioneros, realmente algo en mi interior me dijo que Dios podría estar llamándome a dedicar mi vida al servicio de los pobres como religioso y sacerdote. Más adelante fui al programa Oblato Ven y Ve y me sentí feliz de seguir este camino que creí Dios me estaba presentando, así que solicité entrar a la formación”.
Al terminar la preparatoria el Hno. Mateusz ingresó al programa de PreNoviciado de los Oblatos en Buffalo, Nueva York. Con 18 años, era el miembro más joven de la comunidad Oblata.
Como prenovicio, el Hno. Mateusz tuvo la oportunidad de ayudar por un mes en algunos de los ministerios de los Oblatos en Tijuana, B.C., México y esa experiencia le abrió los ojos a las necesidades de los pobres y el gran impacto que los Oblatos pueden realizar a través de su ministerio en esas apremiantes circunstancias.
“En mi estancia en Tijuana tuve muchas bendiciones, pues conocí a muchas personas cariñosas y fieles de la parroquia y al grupo juvenil, donde tuve la bendición de ver el trabajo de los Oblatos en esa parte del mundo”, dijo el Hno. Mateusz. “Muchos de los jóvenes ahí usaban camisetas que decían “Transformados por Cristo” y creo que esas palabras en verdad capturan cómo Dios toca las vidas de los pobres a través del ministerio Oblato”.
En 2019-2020 el Hno. Mateusz pasó un año en el Noviciado Oblato en Godfrey, Illinois, un tiempo alejado de la familia y amigos para analizar más profundamente si era llamado a la vida religiosa y específicamente como Misionero Oblato. Ese año le dio la oportunidad de crecer tanto a nivel humano como espiritual dentro de una comunidad. En agosto de 2020 el Hno. Mateusz profesó sus primeros votos como Oblato y se inscribió en la Facultad Oblata de Teología (OST por sus siglas en inglés) en San Antonio, a media hora de donde vive su familia.
Como estudiante en OST, el Hno. Mateusz fue parte de la Comunidad de Formación Beato Mario Borzaga, un grupo de seminaristas Oblatos provenientes de todo el mundo, que también estudian en la Facultad. Su comunidad estaba formada por Oblatos no solo de los Estados Unidos, sino también de Zambia, Lesoto, Botsuana, Nigeria, India, Bangladesh, Kenia y México. Además, dos de los Hermanos de la Provincia de los E.U. son originarios de Birmania y Haití.
El año que pasó en la comunidad internacional en San Antonio preparó bien al Hermano Mateusz para sus estudios en Roma. Su camino como Oblato ya le ha llevado a diferentes lugares del mundo y cada paso del camino le convence más de que debe continuar aprendiendo cómo transmitir las Buenas Nuevas. Sigue buscando crecer en su relación con Dios al conocer muchas nuevas personas y tener nuevas experiencias. Sus oraciones son porque todo ello le prepare para un buen trabajo como Oblato con el pueblo de Dios.
P. Louis Studer, O.M.I.
Provincial, Provincia de los Estados Unidos
October 2021
Octubre de 2021
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